Es verano, y es un momento excelente para leer el libro de Luca Costantini. cuenta la historia de Podemos, y muestra a sus dirigentes como unos aventureros codiciosos y destructivos. Consiguieron presentarse como unos idealistas, pero no tenían la menor idea para mejorar la sociedad, ni el menor interés en gestionarla. En cambio, sabían que hay mucho, muchísimo dinero público disponible. Está esperando ser recolectado en forma de ayudas, subvenciones, convenios, campañas y contratos de consultoría, hacia los que los dirigentes de Podemos se abalanzaron con voluntad de sanguijuela: tus impuestos, lamentablemente, no son sólo para sanidad y educación. Los podemitas llegaron al poder demonizando a las élites, pero eran ellos las verdaderas «elites extractivas», que dirían Azemoglu y Robinson. Porque su voluntad de servicio público no existe: quieren vivir bien y ser protagonistas. Y son muy destructivos: no vacilan en demoler las instituciones y sembrar la discordia en la comunidad con tal de acceder al poder y el dinero.
La mala noticia es que la sociedad se mostró muy vulnerable ante estos bucaneros del dinero público, muy hábiles para navegar las corrientes de la frustración y el descontento. La buena es que, gracias a la asombrosa incompetencia podemita, la sociedad parece haber aprendido a conocerlos. Disfrútenlo, y tiemblen un poco.
Comentarios
Yo sí que los veo como corsarios. Y corsarios con Patente de Corso, otorgada por este ¿gobierno? , que se dedican a quedarse, vía impuestos, con la riqueza que los demás hubiéramos conseguido ganar con nuestro trabajo ( Como los corsarios ingleses, con patente de su reina, se dedicaban a desvalijar los galeones españoles que volvían de Ultramar ).
Lo que les va como a un Cristo dos pistolas es lo de "Virtuosos". Y lo malo, es que hay muchísima gente que se cree que lo son..
¡ Porca miseria !
Gracias Don Navarth