Durante el verano y otoño de 1940 la RAF se encargó de frustrar los planes de Hitler sobre Inglaterra, pero los de invadir Rusia se mantuvieron inalterables. Sus generales objetaron. A la dificultad de mantener una guerra en dos frentes, de desdichado recuerdo para los alemanes, volvía a unirse la escasez de materias primas. Las campañas de Polonia, Francia e Inglaterra habían dejado exhaustos los stocks de municiones y, una vez más, de carburante y goma. La magnitud de la empresa, adujeron los generales, requería acumular unas reservas colosales. Hitler escucho las razones, pero, anunció, la invasión tendría que tener lugar en primavera. Así que el Ministerio de Economía se puso en contacto con IG Farben y, dada la alarmante escasez de caucho, comunicó a sus directivos que era imprescindible un incremento inmediato de la producción de Buna *. Tras unas horas de reunión, las partes acordaron que, para atender a los requerimientos del Ministerio, sería necesario emprender la construcció
* Todo parece indicar que Navarth es Fernando Navarro, former MP de Ciudadanos por Baleares en la XI y XII Legislatura